• =?UTF-8?Q?=28IV=C3=81N=29=3A_CANA=C3=81N_est=C3=A1_liberado_con_la_VIDA

    From ivanvalarezo@gmail.com@21:1/5 to All on Fri Oct 23 18:24:57 2020
    Sábado, 24 de Octubre, 2020 de Nuestro Salvador Jesucristo, Guayaquil, Ecuador-Iberoamérica


    (Cartas del cielo son escritas por Iván Valarezo)




    CANAÁN está liberado con la VIDA de su HIJO JESUCRISTO en nosotros, para gozarnos de riquezas cotidianas siempre:




    Realmente, nuestro Padre celestial había empezado una relación muy importante con Abraham, porque Él necesitaba que él sea su amigo, así como alguien tan cerca como su Hijo Jesucristo y así como su Espíritu Santo son a Él en la gloria celestial,
    por ende, Él establecer su vida eterna en la tierra que Él había escogido, y esta es Canaán, su dulce hogar por una eternidad entera. Ciertamente, nuestro Padre celestial necesitaba su vida eterna establecida en Canaán, entregándosela a sus hijos
    nacidos de su imagen, su alma santísima y su corazón santísimo, empezando con Adán y Eva en el paraíso, derrotado ya por la serpiente de Lucifer, cuando ambos comieron del fruto prohibido, del árbol de la ciencia del bien y del mal, y así, ellos
    finalmente vivan victoriosos sobre Lucifer siempre.


    Ya que, Adán y Eva habían empezado a vivir una vida que había sido derrotada en el paraíso, cuando comieron del fruto prohibido, haciendo que ellos renazcan en la rebelión de Lucifer, y así, ellos jamás amen, honren y glorifiquen el santo nombre
    fuegos de nuestro Padre celestial sobre el monte santo de Jerusalén, en Canaán, más bien, vivían su rebelión por toda la tierra desafortunadamente. Por lo tanto, nuestro Padre celestial necesitaba entregarles a ellos su vida eterna, que Lucifer
    siempre ha fallado en entenderla en el reino angelical, para que sea él finalmente derrotado con su rebelión, que había logrado imponerla sobre Adán y sus hijos en la tierra, cuando Adán y Eva comieron del fruto prohibido.


    Por cierto, esta seria una vida gloriosa que cada hombre, mujer, niño y niña recibirá en la tierra, aunque ellos hayan ya descendido al infierno eternamente atormentados: porque fallaron en amar, honor y glorificar su santo nombre fuego, bautizados en
    agua, y así, ellos vivan por siempre enriquecidos en sus días en la tierra y en la gloria angelical y hasta la eternidad. Por lo tanto, nuestro Padre celestial necesitaba a Abraham obedeciéndolo a Él en sus palabras de vida, entregadas a él en sus d
    as, porque él iba a recibir una vida gloriosa, que necesitaba derrotar a Satanás, ángeles caídos, la muerte y el infierno tormentoso, que había recibido ya en aquellos días a la humanidad entera perdidos eternamente, por no conocer su santo nombre
    fuegos.


    Sin embargo, para que Abraham reciba esta vida gloriosa de nuestro Padre celestial, entonces, él tenia que ser enriquecido grandemente sobre toda la gente rica de aquellos días, para él y sus hijos que iban a nacer en generaciones venideras, empezando
    con Isaac, por ende, ellos tenían que ser muy enriquecidos finalmente para recibir su vida eterna victoriosa sobre Satanás y sus secuaces. Por eso, es que nuestro Padre celestial continúo derramando de sus riquezas, poderes y grandes bendiciones sobre
    Abraham, que no solamente lo estaba enriqueciendo a él y a su familia, pero igualmente a vecinos y amistades de cerca y de lejos, y hasta decir: Señor, me as enriquecido demasiado ya—entrégaselas a otros también, para que sean tan ricos como yo.


    Verdaderamente, Abraham falló en entender lo que nuestro Padre celestial estaba haciendo con él y con su familia al entregarle grandes riquezas, poderes y bendiciones, que él había fallado en conocer en toda su vida y hasta que finalmente él lo
    obedeció a Él, caminando hacia Canaán, en donde riquezas esperaban por él y por sus hijos prometidos viviendo en generaciones futuras. Realmente, nuestro Padre celestial tenia grandes planes para enriquecer la tierra entera junto con las familias de
    las naciones, porque Él es un Dios que ama vivir en grandes riquezas con su Hijo Jesucristo, su Espíritu Santo, las huestes angelicales y ahora con las familias de las naciones, empezando siempre contigo y con los tuyos.


    Sin duda, estas son glorias, poderes, bendiciones y riquezas sin fin que nuestro Padre celestial necesita empezar a tener con sus hijos para vivir en Canaán, empezando con Isaac, por eso es que, Él necesitaba enriquecer a Abraham para que reciba a sus
    hijos prometidos con grandes riquezas desconocida antes en la tierra entera hasta aquellos días. Por cuanto, Satanás había empezado a empobrecer la tierra desde que él hizo que Eva comiera del fruto prohibido, dándoselo a Adán y a sus hijos, separá
    ndolos así a ellos de nuestro Padre celestial, su Hijo Jesucristo, su Espíritu Santo y del monte santo de Jerusalén y su santo nombre fuegos, para que jamás vivan la vida eterna, enriqueciéndolos toda una vida siempre.


    Ahora, nuestro Padre celestial necesitaba restaurar la tierra entera a riquezas, glorias y dulzuras en las que Él la había creado inicialmente para que sea su dulce hogar con sus hijos naciendo en Canaán, bautizados en agua, invocando la perfecta
    santidad de su santo nombre, y así, ellos conozcan su amor maravilloso desde su corazón santísimo, amándolos verdaderamente con riquezas cotidianas toda una eternidad. Definitivamente, glorias, poderes, bendiciones, sanidad y riquezas interminables
    escondidas en Canaán, nacieron en su corazón santísimo junto con sus hijos, que son los hijos prometidos de Israel y de las familias de las naciones, y así, ellos vivan con Él eternamente enriquecidos en su nuevo reino de su amor infalible de su
    corazón santísimo por ti y por tus amados en toda la tierra.


    Por lo tanto, por eso es que, nuestro Padre celestial necesitaba tener no solamente a Abraham llenó de sus bendiciones, poderes y riquezas interminables para su Hijo Jesucristo que iba a nacer del vientre estéril de Sarah como Isaac, por el Espíritu
    Santo, pero igualmente, Jacobo junto con los patriarcas israelíes necesitaban ser enriquecidos poderosamente en el mundo que Satanás lo estaba llevando hacia la ruina total. Desesperadamente, Satanás necesitaba continuar su línea de empobrecer a las
    familias de las naciones, para que ellas fallen en conocer que nuestro Padre celestial era muy rico para cada uno de ellos, porque Él había dado a luz a ellos, amándolos así: sirviendo y adorando naturalmente su santo nombre fuegos con riquezas
    inagotables, que solamente pueden emanar de Él hacia ellos, empezando en Canaán.


    Sin embargo, Satanás necesitaba expandir no solamente su pobreza hacia las naciones, pero igualmente sus ataques terribles a toda vida, para que todos siempre fallen en conocer el amor insondable de nuestro Padre celestial por ellos, derramándose
    continuamente desde su corazón santísimo con bendiciones, poderes y riquezas inagotables únicamente para amar, servir y adorar su santo nombre fuegos sobre el monte Sion en la tierra. Realmente, nuestro Padre celestial necesitaba contra atacar lo que
    Satanás hacia con las naciones, derramando desde su corazón santísimo su amor insondable por ellos, y lleno con bendiciones, poderes y riquezas inacabables, enriqueciendo así a cada hombre, mujer, niño y niña, para que conozcan su amor asombroso
    por ellos, pero conocerlo únicamente con su corazón enriquecido, con riquezas que Él enriqueció a Abraham grandemente.


    Definitivamente, esta es una vida todopoderosa, que nuestro Padre celestial necesitaba haberla vivido no solamente con Abraham y con sus hijos prometidos en generaciones venideras, pero igualmente con las familias de las naciones, derrotando a Satanás,
    ngeles caídos, la muerte junto con pobreza, enfermedades y el infierno, y así, ellos vivan una vida victoriosa en la tierra y en el cielo por una eternidad. Por eso, es que fue muy importante para nuestro Padre celestial establecer su vida eterna en
    Canaán, haciendo de Abraham muy rico, y hasta que él mismo dijo no puedo recibir mas riquezas del cielo arriba, tengo muchas, y así, su Hijo Jesucristo nacido como Isaac encuentre riquezas para él y para sus hermanos y hermanas en toda la tierra
    siempre.


    Positivamente, nuestro Padre celestial necesita a su Hijo Jesucristo junto con su Espíritu Santo y los hijos de Israel y de las naciones, recibiendo desde su corazón santísimo su amor infalible por ellos, pero conociéndolo a Él con grandes riquezas
    insondables, que Él siempre ha gozado en la gloria celestial por una eternidad, y así, sus hijos fallen en conocer pobrezas de Satanás. Con seguridad, esta es una vida enriquecida, que nuestro Padre celestial necesitaba establecer en Canaán, una vida
    lista para recibir cada bendición, poder y riqueza descendiendo de la gloria celestial para sus hijos de Israel y de las familias de las naciones, porque esta es una vida que solamente existe en su semilla santa, que es Isaac, la carne sin pecados y
    sangre expiatoria.


    Es decir, que nuestro Padre celestial ya nos ha bendecido, empoderado, enriqueciendo así toda vida humana grandemente con asombrosas riquezas cotidianas desde la gloria celestial, que existen hoy en día en Canaán para ti y los tuyos, vecinos y
    amistades: para que vivan gozándolas diariamente con Él, su Hijo Jesucristo y su Espíritu Santo en toda la tierra—enriqueciéndola enteramente así contigo, como siempre. Ya que, esta es una vida asombrosa, que es sostenida continuamente por nuestro
    Padre celestial y con su semilla santa, que es la carne sin pecados y la sangre expiatoria de Isaac, atrayendo hacia ti: amor, paz, prosperidad y riquezas interminables, rechazando siempre a Satanás y sus ángeles caídos cada día, que están alrededor
    siempre causando problemas, que son hasta incontables.


    Legalmente, nuestro Padre celestial enriqueció no solamente a Abraham junto con Sarah y los demás de su hogar, vecinos y amistades de cerca y de lejos, pero igualmente a las naciones que estaban viviendo en la tierra por generaciones venideras,
    incluyendo las que están ya en el infierno, para que ellas vivan su vida enriquecida en su semilla santa en toda su nueva tierra. Realmente, esta es una vida gloriosa, que ya ha expulsado a Satanás y a sus ángeles caídos, incluyendo la muerte,
    pobreza, enfermedades y el infierno con sus ataques cotidianos, como brujerías de Satanás y de familias satanistas, y así, tú vivas unos días hermosos y gloriosos y llenos de bendiciones de Canaán, enriqueciendo tú diario vivir en la tierra para
    ser feliz siempre.


    Legítimamente, fue importante para nuestro Padre celestial tener a Abraham sacrificando tres carneros con sus mitades opuestas una a otra junto con dos aves sin cortar sobre la roca de salvación, salpicadas con sangres expiatorias, porque su Hijo
    Jesucristo tenía que vivir en Canaán como Isaac y con su carne sin pecados y llena de riquezas, enriqueciendo así la tierra entera, especialmente a ti. Ya que, así fue como su Hijo Jesucristo fue inmolado desde antes de la fundación del mundo en el
    reino celestial ante Él, su Espíritu Santo y sus huestes angelicales, como testigos de los eventos que deberían suceder en el reino angelical, pero igualmente en Canaán, y así, Él mismo establecer finalmente su vida en la tierra, removiendo el
    pecado para siempre por ti.


    Esta era una vida muy importante, que su Hijo Jesucristo necesitaba vivirla en el hogar de Abraham junto con sus hijos adoptados, porque necesitaba enriquecer a cada hombre, mujer, niño y niña de las familias de las naciones, removiendo así el pecado
    del mundo, cerrando el infierno tormentoso para que jamás vuelva a recibir a sus hijos perdidos en sus pecados. Sin embargo, ahora nuestro Padre celestial necesitaba remover el pecado de toda la tierra con su gloriosa vida, que Él tuvo a su Hijo
    Jesucristo viviéndola en Canaán con Abraham y en su hogar junto con sus vecinos y amistades: porque no solamente Jacobo iba nacer, pero igualmente los patriarcas israelíes junto los hijos prometidos, quitando el pecado del mundo en un solo día.


    Consiguientemente, visto que nuestro Padre celestial había sanado el vientre estéril de Sarah, tornándolo en su corazón santísimo, por poderes del Espíritu Santo, porque no solamente su Hijo Jesucristo seria Isaac, pero igualmente los hijos
    prometidos, pero naciendo en el cautiverio egipcio, tomando pecados de las familias de las naciones, enriqueciéndolos así a ellos con su carne sin pecados y su sangre expiatoria infinitamente. Legalmente, cada hombre, mujer, niño y niña de Israel y
    de las naciones necesitaba bautizarse en agua, invocando a nuestro Padre celestial, su Hijo y su Espíritu Santo, abandonando la carne pecadora y el espíritu de error por la carne sagrada y el Espíritu Santo, que había ya expulsado a Satanás, muertes
    y familias satanistas de Canaán, y así, ellos vivan riquezas cotidianas toda una vida.


    Es decir, también que nuestro Padre celestial tuvo a Abraham comiendo con Él del pan y vino, que su Hijo Jesucristo sirve diariamente sobre su Mesa santa a huestes angelicales, manteniéndolas santas y perfectas, para amar, servir y honrar su santo
    nombre fuegos sobre el monte Sion por una eternidad entera: expulsando así a Satanás y sus ángeles caídos de la gloria celestial para siempre. Bien, esto es lo que nuestro Padre celestial necesitaba hacer con su Hijo Jesucristo y con su Espíritu
    Santo para expulsar a Satanás y sus ángeles caídos junto con familias Satanistas, diciendo que son judíos, cuando no lo fueron jamás, y así, Canaán fluya riquezas, como leche y miel hacia hogares en la tierra entera, honrando finalmente su santo
    nombre fuegos toda una eternidad.


    Entonces, esto significaba para nuestro Padre celestial, que Él ahora podía enriquecer la tierra entera, enriqueciendo primero a Abraham y seguidamente a cada hombre, mujer, niño y niña de Israel y de las naciones, para que Él pueda empezar a vivir
    su vida gloriosa, que Él siempre ha soñado vivirla con sus hijos, revestidos con sus riquezas asombrosas de su dulce hogar, en Canaán. Visto que, nuestro Padre celestial necesitaba tomar todos los pecados de las familias de las naciones pasadas y
    futuras, destruyéndolas todos en el bautismo en agua del Mar Rojo, y así, Él eventualmente quite el pecado del mundo en un día, enriqueciéndolo con su amor asombroso de su corazón santísimo por su Hijo Jesucristo y por su Espíritu Santo hacia
    toda una eternidad.


    Además, nuestro Padre celestial necesitaba conquistar Canaán, porque Satanás estaba allí con sus naciones de familias satanistas, haciendo cada día brujerías, llenando la tierra entera con males, especialmente en Canaán, y así, nuestro Padre
    celestial falle en tener su voluntad perfecta en la tierra con sus hijos que nacieron de su imagen y de su alma santísima, por poderes de su Espíritu Santo. Verdaderamente, nuestro Padre celestial necesitaba establecer su vida eterna no solamente en
    Abraham, pero igualmente en sus hijos prometidos junto con las familias de las naciones, para que vivan su vida eterna: ya victoriosa sobre Satanás, ángeles caídos, muerte y el infierno tormentoso para siempre en la eternidad, y así, finalmente Él
    tenga su nuevo reino, estableciéndolo con nuevos poderosos asombrosos jamás antes vistos.


    Por eso, nuestro Padre celestial tenía que tener ya a Abraham viviendo su vida eterna con Isaac, porque al nuestro Señor Jesucristo nacer como Isaac entonces fue así, para que él finalmente derrote a sus enemigos en sus vidas, enemigos que
    verdaderamente podían destruirlo a él y a sus hijos prometidos, porque Él estaba amando, sirviendo y obedeciendo toda palabra de vida en la tierra. Es como Israel siempre ha conocido familias satanistas en todas sus generaciones pasadas, haciendo
    brujerías diariamente entre ellos junto con mentiras, calumnias y decepciones terribles, para que mueran, y así, poderes del Juramento a Isaac cesarían de crecer, que es la voluntad perfecta de nuestro Padre celestial llenando la tierra entera con
    nuevas glorias, poderes y riquezas sin fin por toda una eternidad.


    Por lo tanto, nuestro Padre celestial necesitaba su misma vida en la tierra para Abraham y sus hijos prometidos junto con las familias de las naciones, viviendo su vida que lo ha amado, obedecido y honrado a Él y a su santo nombre fuegos para siempre ya
    en Canaán, y así, la tierra entera vuelva a ver vida nuevamente, pero sin pecado alguno. Con certeza, cuando nuestro Padre celestial vio a Abraham que había vivió su vida eterna junto con su Hijo Jesucristo viviendo como Isaac en su familia, vecinos
    y amistades de cerca y de lejos, entonces, él derrotó a sus enemigos enteramente en su vida, que él fue seguidamente llamado con su único hijo Isaac al monte santo de Jerusalén, descansando sobre el Moria.


    Además, nuestro Padre celestial necesitaba declarar a Abraham perfecto y santo, así como Él lo es en la gloria angelical ante su Hijo Jesucristo, su Espíritu Santo y sus huestes angelicales, y así, Él derramar sobre la carne sin pecados y sangre
    expiatoria de Isaac su corazón santísimo y lleno de su Juramento a Isaac, prometiendo bendiciones y su amor eterno junto con riquezas insondables. Legítimamente, nuestro Padre celestial estaba prometiendo su asombrosa fe y amor infalible no solamente
    a Abraham y sus hijos prometidos en generaciones venideras, pero igualmente a las familias de las naciones, yaciendo ya en el infierno tormentoso junto con sus hijos de generaciones futuras, y así, ellos vivan nuevamente en sus tierras natales: amando,
    sirviendo y alabándolo a Él y su santo nombre fuegos.


    Ahora, para nuestro Padre celestial finalmente entregar su vida eterna a Abraham y sus hijos prometidos y las familias de las naciones, entonces, Satanás, ángeles caídos, la muerte y el infierno tormentoso tenían que ser derrotados, y para que esto
    sea posible: el pecado en la tierra tenía que ser destruido con su semilla santa únicamente nacida de Él, por el Espíritu Santo, como Isaac. Este es Isaac nacido con la carne sin pecados y la sangre expiatoria junto con su vida eterna, lista para ser
    parte de cada hombre, mujer, niño y niña de las familias de las naciones: y así, ellos puedan vivir sus vidas cotidianas victoriosas siempre sobre Satanás y su pecado junto con los ángeles caídos, la muerte y el infierno en todos sus días.


    Esta es la vida que tú vivirás en tu país natal, en donde nuestro Padre celestial junto con su Hijo Jesucristo y su Espíritu Santo ha expulsado ya a Satanás con sus familias satanistas de Canaán, y así, tú goces de sus riquezas asombrosas
    derramadas sobre Isaac, y esto es sobre ti y los tuyos, vecinos y amistades de las familias de las naciones. Sinceramente, bautizado en agua, invocando la perfecta santidad de su nombre, como Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacobo, entonces,
    esta vida será parte de ti enteramente, que ya ha expulsado a todo enemigo de tu diario vivir, para que tú solamente conozcas su amor, paz, seguridad y bienestar, enriqueciéndote a ti, tus amados toda una vida, sin perder ninguna bendición jamás.


    Y es aquí: En donde toda inseguridad desaparece, porque tú estarás viviendo la vida de nuestro Padre celestial, entregada a ti enteramente, que su Hijo Jesucristo y su Espíritu Santo la vivieron ya en Canaán, derrotando a Satanás, muertes,
    infiernos, enfermedades y enemigos en tu vida cotidiana, porque es una vida que destruyó ya todo mal por ti—por ende, vívela confiadamente cada día. Realmente, cada hombre, mujer, niño y niña, bautizado en agua, invocado la perfecta santidad del
    Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, abandonaran la carne pecadora y el espíritu de error por la carne sin pecados y el Espíritu Santo, entonces, el Padre mismo vivirán su vida eterna en ti, bautizado: victoriosa sobre Satanás, pecados, pobrezas,
    enfermedades, muertes y del infierno en la tierra siempre.


    Sin duda, cosas endiabladas suceden alrededor de ti, tus amados, vecinos y amistades, entonces, estas anormalidades suceden, porque espíritus impuros están operando, que esta vida divina, que tú recibirás bautizado en agua, invocando la perfecta
    santidad de su nombre, las ha expulsado ya de tu hogar, lugares de trabajo y lugares que visitas frecuentemente, únicamente para conocer amor, paz, prosperidad y riquezas cotidianas siempre. Por consiguiente, fue importante para nuestro Padre celestial
    tener a su Hijo Jesucristo, que es Isaac junto con Jacobo y los doce patriarcas israelíes y los hijos prometidos viviendo en generaciones venideras y hasta que su reino venga a la tierra, porque ellos son la cruz, viviendo el cautiverio egipcio,
    arrestando tus pecados y de las familias de las naciones para el bautismo del Mar Rojo.


    Además, nuestro Padre celestial necesitaba tomar tus pecados, de tus amados, de tus vecinos y amistades junto con los de las familias de las naciones pasadas y futuras, abandonándolas en el bautismo en agua del Mar Rojo, invocando la perfecta santidad
    de su nombre, y así, tú vivas su vida eterna toda una vida victoriosa sobre Satanás, pecados y muertes del infierno tormentoso, para siempre. En nuestra historia, con Israel antiguo, nuestro Señor Jesucristo y el Espíritu Santo estaban viviendo
    entre ellos, como la cruz de nuestro Padre celestial, llevando tus pecados y de las familias de las naciones pasadas y futuras al bautismo en agua del Mar Rojo, finalmente descendiendo al corazón de la tierra y destruir el infierno tormentoso por ti y
    por tus amados, para siempre.


    Realmente, esta es una vida todopoderosa, que nuestro Padre celestial te la entregó ya a ti, viviendo siempre victoriosa sobre Satanás, pecados, enfermedades, pobreza, muerte, infiernos y familias satanistas por ti y los tuyos, lográndolo todo
    inicialmente en Canaán, y así, tú le ames y le sirvas: honrándolo a Él y su santo nombre fuegos sin ataques enemigos; finalmente gozando tu vida en su felicidad infinita. Por lo tanto, cuando Israel antiguo fue bautizado en el Mar Rojo, entonces,
    ellos abandonaron tus pecados y de tus amados, vecinos y amistades junto con los de las familias de las naciones, y así, Él destruir a Satanás y las familias satanistas haciendo brujerías para el infierno tormentoso, para que el santo nombre fuegos
    de nuestro Padre celestial jamás enriquezca la tierra entera.


    Ahora, nuestro Padre celestial tenía que tener a toda la casa de Israel recogiendo pecados de las familias de las naciones pasadas y futuras por cuatro siglos en el cautiverio egipcio sin jamás poder derrotar a ningún enemigo para escapar hacia Canaá
    n, porque ellos no estaban bautizados en agua aun—verdaderamente, ellos estaban en problemas serios y sin ver vida, felicidad ni menos libertar jamás. Ciertamente, esta es tu verdadera vida hoy, todopoderosa sobre Satanás y brujerías: si tú ya te
    has bautizado en agua, invocando la perfecta santidad de nuestro Padre celestial, su Hijo Jesucristo y su Espíritu Santo, y así, tú vivas tu vida que ya ha sido bendecida en Canaán, tierra santa, llena de riquezas, enriqueciéndote a ti, tus amados,
    vecinos y amistades alrededor del mundo entero.


    Verdaderamente, bautizado en agua, invocando la perfecta santidad de nuestro Padre, su Hijo y su Espíritu, entonces, tú no recogerás pecados ni ataques de espíritus inmundos, demonios siempre trabajando con familias satanistas, ansiosas en destruirte
    a ti para Satanás y la muerte, porque así son en tu derredor, más tú tienes una vida todopoderosa que ya los expulsó de Canaán y de tu vida enteramente. Realmente, Israel antiguo, bautizado en agua del Mar Rojo, invocando la perfecta santidad de su
    nombre, como Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacobo, entonces, ellos vivieron su vida eterna con poderes del Juramento a Isaac, destruyendo enemigos por el desierto del Sinaí, pero igualmente en el corazón de la tierra por ti y tu familia,
    vecinos y amistades por una eternidad.


    Legalmente, nuestro Padre celestial tuvo a todo Israel antiguo, bautizados en agua, convertidos en ciudadanos legítimos de Canaán, poseyendo así poderes asombrosos del Juramento a Isaac, que fueron derramados desde su corazón santísimo sobre la
    carne sin pecados y la sangre expiatoria de Isaac y con otros poderes importantes, derrotando instantáneamente a enemigos en toda la tierra, por ti y por tu familia siempre. Verdaderamente, Israel antiguo necesitaba bautizarse en agua del Mar Rojo no
    solamente para enriquecerse con riquezas cotidianas de Canaán, pero igualmente para poseer poderes ya derramados enteramente sobre el dulce hogar de nuestro Padre celestial, derrotando enemigos infinitamente: y sus hijos vivan su gloriosa vida eterna
    sin sufrir jamás ataques enemigos, como ángeles caídos, familias satanistas y sus brujerías, la muerte y el infierno.


    Realmente, nuestro Padre celestial ha liberado ya enteramente a Canaán de Satanás, ángeles caídos, muertes y del infierno, y tú camines con Él, gozando riquezas ya entregadas a ti, para que tú jamás vivas tu vida con familias satanistas, hacié
    ndote brujerías a ti y tus amados: y así, tú solamente conozcas amor, conocimiento de Él, sanidad, sabiduría, inteligencia y alegrías interminables por una eternidad entera. Sin duda, nuestro Padre celestial no deseaba ver los ejércitos de Faraón
    persiguiendo a Israel antiguo por el desierto del Sinaí para regresarlos a Egipto con grandes riquezas, que ellos llevaban hacia Canaán, porque cuando salían de Egipto, entonces, ellos recibieron muchas riquezas de cada egipcio para que abandonen su
    tierra por temor a la muerte, que había matado a sus primogénitos.


    Bien, esto es exactamente lo que nuestro Padre celestial junto con su Hijo Jesucristo y con su Espíritu Santo hará por ti, tus amados, vecinos y amistades, porque tú habrás renacido del bautismo en agua, invocando la perfecta santidad de su santo
    nombre, entonces, tus enemigos serán ahogados del mar también, sin jamás volverte a molestar ni tocar tus riquezas en todos tus días. Realmente, nuestro Padre celestial necesita que lo ames, le sirvas y lo alabes a Él por su semilla santa nacida de
    l, su Hijo Jesucristo y su Espíritu Santo, porque tú abandonaras a tus enemigos en aguas profundas, como el Mar Rojo, el río Jordán, en tu bañera hogareña, piscina, río o playa, sirviéndole a Él cada día con riquezas, sin sufrir jamás ataques
    enemigos.


    Legalmente, nuestro Padre celestial te necesita a ti amándolo, sirviéndolo y alabándolo a Él en Canaán, porque esta es tierra santa para vivir siempre con sus hijos, bautizados en agua, conociéndole únicamente a Él en su semilla santa, que es la
    carne sin pecados y sangre expiatoria de Isaac, en donde su paz reina por ti y tus amados una eternidad con riquezas cotidianas siempre. Verdaderamente, fue importante para nuestro Padre celestial sentarse con Abraham a comer del pan y vino de su Mesa
    santa, servida siempre por su Hijo Jesucristo no solamente a las huestes angelicales de la gloria celestial, pero igualmente a sus hijos nacidos de Israel y de las familias de las naciones, y así, ellos sean santos y perfectos, así como Él lo es
    eternamente.


    Amorosamente, la cruz nació de nuestro Padre celestial, como su naturaleza divina, su semilla santa, que es su Hijo Jesucristo naciendo como Isaac del vientre estéril de Sarah, por poderes del Espíritu Santo, para vivir su vida eterna en Canaán,
    derrotando a Satanás y todo enemigo, por amor a sus hijos naciendo en el cautiverio egipcio, llevando los pecados del mundo entero al bautismo. Esta es la cruz, que nació en el cautiverio egipcio, absorbiendo los pecados de las familias de las naciones
    pasadas y futuras, para llevarlas al bautismo en agua del Mar Rojo, abandonándolos para siempre en el lecho marino para que sus hijos no los vuelvan a ver jamás, porque todos ellos vestirán su semilla santa, la carne sin pecados para siempre.


    Considerando que: la cruz una vez bautizada en el Mar Rojo por Moisés junto con Israel antiguo, entonces, ellos vistieron la carne sin pecados y la sangre expiatoria para expiar, juzgar y cubrir cada pecado con sangres expiatorias de carneros finalmente,
    conquistando puertas del infierno para convertirlas en puertas al cielo sobre el monte Sion con perfecta salvación para toda alma viviente, en Canaán. Aquí es donde: nuestro Padre celestial pudo remover el pecado de toda la casa de Israel y de las
    familias de las naciones pasadas y futuras, porque su Hijo Jesucristo fue sanado de heridas en su cara y en su cuerpo, sanando así a cada hombre, mujer, niño y niña en la tierra entera instantáneamente, para su nueva tierra en la eternidad venidera.


    Aquí es cuando, nuestro Padre celestial declaró perfecto y santo no solamente a Israel entero y las familias de las naciones pasadas y futuras, pero igualmente a Canaán y toda la tierra, porque no hay pecado en la humanidad entera, mas bien lo que
    tenemos es a Satanás haciendo brujerías con familias satanistas en Canaán, diciéndole al mundo que el pecado no fue quitado jamás. Sin embargo, la verdad es que el pecado ha sido removido del corazón de la tierra y de cada hombre, mujer, niño y ni
    a de las familias de las naciones pasadas y futuras, pero para recibir estas poderosas bendiciones de gracia, misericordia y justicia divina de nuestro Padre celestial, su Hijo Jesucristo y su Espíritu Santo: tú tienes que haberte bautizado ya en agua.


    Aquí es cuando: Tú abandonaras la carne pecadora y el espíritu de error por la carne sin pecados y el Espíritu Santo, viviendo en una vida que existe siempre en nuestro Padre celestial, su Hijo Jesucristo y su Espíritu Santo en la gloria angelical,
    pero ahora Él quiere que tú la vivas también con su amor infalible victorioso sobre Satanás y sus brujerías para siempre. Actualmente, esta es una vida gloriosa que Satanás, ángeles caídos, muerte, familias satanistas y el infierno, amarían
    derrotarla, pero todos ellos ya fueron derrotados por ella, porque nuestro Padre celestial, su Hijo y su Espíritu Santo la vivieron, deshaciendo obras de Satanás en Canaán para conquistar al mundo entero, haciéndolo finalmente libre de pecados en la
    eternidad, como su nueva tierra por amor a ti.


    Verdaderamente, bautizado en agua, invocando su nombre santísimo, entonces, tú recibirás esta vida gloriosa, derrotando a Satanás, ángeles caídos, enfermedades, pobreza, familias satanistas con brujerías cotidianas y el infierno, convirtiendo así
    el corazón de la tierra perfecto y santo, así como lo es (su corazón amoroso) en su pecho, por ende, no hay pecado en la tierra, pero si hay brujerías: engañando, cegando a muchos. Realmente, esta es la vida que nuestro Padre celestial te entregó a
    ti, tus amados, vecinos y amistades del mundo entero, no importando jamás su fe religiosa, sean ya musulmanes, islámicos, budistas, hindús, hebreos, cristianos y demás: todos pueden vivir su vida nueva, liberada de problemas, demonios, brujos,
    enfermedades, maldiciones, accidentes, pobreza y del infierno, para conocer únicamente amor, prosperidad y alegrías interminables siempre.



    [continued in next message]

    --- SoupGate-Win32 v1.05
    * Origin: fsxNet Usenet Gateway (21:1/5)